Durante años la iluminación artificial ha intentado infructuosamente imitar el brillo y el dinamismo de la luz natural. Pero hoy en día, el desarrollo de tecnologías LED que reproducen de forma más fiel el espectro de la luz natural, como la gama Nature de Lluria, proporciona una potente herramienta para diseñar espacios en armonía con la luz del sol, centrados en el bienestar de las personas, y más respetuosos con el sistema circadiano humano.
¿Qué es la iluminación circadiana?
La iluminación circadiana es aquella que regula la luz artificial de acuerdo a las necesidades de salud y bienestar de las personas, respetando los ciclos de la biología humana, y reduciendo al mínimo los efectos negativos de la luz eléctrica en nuestro reloj biológico.
El cerebro de cada persona recibe a través de los ojos señales visuales que le informan de cuando es de día y de noche, y a través de estas señales controla la cantidad de melatonina liberada, generando somnolencia con la oscuridad y un estado de alerta con la luz. El ritmo circadiano es básicamente el reloj interno que se genera en cada individuo a partir de estas señales. La luz afecta nuestros sistemas visuales y no visuales y los científicos han descubierto que ciertas longitudes de onda de tono azul emitidas por las fuentes de luz artificial pueden alterar el ritmo circadiano de las personas.
La luz perfecta
Para responder a las exigencias de una iluminación centrada en el ser humano, Lluria ha creado la tira de LED modelo Nature, desarrollada según las directrices del método TM-30-18 de IES, que mide y evalúa con mayor precisión las propiedades de las fuentes de luz y permite ajustarse a los parámetros más cercanos a la luz natural. En el LED Nature el índice de fidelidad (Rf), es Rf>95; y el índice de gama (Rg), es _> 100. Unas características que muestran una calidad de luz excelente y que hacen posible trasladar a los espacios interiores los beneficios de la luz solar.
Las tres herramientas de la iluminación centrada en el ser humano
Hay tres herramientas indispensables para diseñar una iluminación circadiana en los espacios interiores: regular la intensidad, controlar la temperatura de color y ajustar el estímulo visual.
Regular la intensidad de la luz es la solución más común, en la cual las fuentes de luz mantienen una temperatura de color (TC) concreta mientras la intensidad de la luz se regula, dependiendo de la hora del día, con una intensidad más baja a primera hora de la mañana, aumentando a medida que avanza el día y reduciéndose a partir del atardecer.
El control de la temperatura de color permite imitar la variación natural en el ciclo de día y noche, con temperaturas de color más frías cuando el sol está más alto en el cielo y temperaturas de color más cálidas cuando las personas se duermen o se despiertan. Normalmente se regula junto a la intensidad de la luz.
El ajuste del estímulo visual es un ajuste más avanzado y se consigue con LEDs de composición espectral más cercana a la luz natural, como el LED Nature, permitiendo acercarse más a la luz del día y controlando tanto la fidelidad de la luz como la reducción de longitudes de onda azul, en combinación con las dos herramientas anteriores.
Aplicaciones y beneficios
Uno de los sectores más interesado a estas nuevas tecnologías es seguramente el ámbito médico, donde la iluminación saludable puede permitir grandes avances en la calidad de vida de las personas, no solo para los pacientes, sino también para el personal médico.
Pero hay mucho potencial también en otros sectores más comerciales o de la vida cotidiana:
Lugares de trabajo:
La regulación de intensidad en las oficinas y el control de temperatura de color en centros de enseñanza se emplea desde hace décadas. La certificación WELL que promueve estándares de salud y bienestar en espacios interiores, defiende, además de la iluminación natural, la iluminación artificial de calidad y el respeto del ritmo circadiano.
Entornos comerciales:
Las tiras de LED Nature mejoran la percepción de los colores y la precisión visual, por lo que son totalmente indicadas en espacios comerciales, donde resulta de vital importancia reproducir los colores y los materiales de manera fiel. En Lluria sabemos que cada marca tiene necesidades muy específicas a nivel de imagen y de exposición de los productos, por lo que poder calibrar intensidad, temperatura de color y espectro lumínico es la clave para poder responder a todo tipo de exigencias.
Espacios dedicados al bienestar físico y emocional:
Spas, gimnasios, centros de salud y belleza aplican cada vez más los sistemas de iluminación circadiana, para potenciar los beneficios de los tratamientos, induciendo una mayor relajación o una mayor tonificación, según las necesidades y las preferencias de cada persona.
Viviendas que carecen de iluminación natural:
En general, en los espacios donde la aportación de iluminación natural es insuficiente resulta sumamente interesante trabajar con fuentes de luz que la puedan simular, tanto para suplir su falta total, como para complementar la aportación de luz natural existente. Combinado con un diseño de iluminación adecuado, se optimiza la distribución de la luz en el espacio y su integración en la arquitectura.
El futuro de la luz circadiana
Numerosos estudios desarrollados en escuelas, hospitales y oficinas demuestran que los sistemas de iluminación circadianos tienen éxito a la hora de aumentar el estado de alerta y mejorar el bienestar de las personas. Hay cierta diferencia si usamos el espectro de color de la luz para modificar el ritmo circadiano o para apoyarlo. La gama Nature es una herramienta muy valiosa en los diseños de iluminación que tienen en cuenta no solo la composición espectral de la luz, sino también su distribución en el espacio, su impacto visual y su aportación emocional y fisiológico a las necesidades de las personas.
Contáctanos al mail info@lluria.com y concierta una cita para comprobar los efectos de la gama Nature en nuestro laboratorio Lluria Xperience.